Actualmente la iniciativa privada está a la expectativa de la presentación de la reforma que regularía o, dicen algunos, eliminaría el outsourcing en México.
Roberto Suárez, quien es secretario general de la Organización Internacional de Empleadores, aseguró que la prohibición “tajante” de la subcontratación laboral podría ser contraproducente, pues es una fuente de creación de empleo que, además, tiene un impacto positivo en la productividad de las empresas.
“En todo tenemos que tener un enfoque inteligente que por un lado respete el derecho de los trabajadores y por otro lado no lo restrinja totalmente”, dijo.
Bettina Schaller, presidenta de la Confederación Mundial del Empleo (WEC), afirmó que en el contexto de la pandemia, no solo ha provocado estragos en la salud pública, sino también en la economía, la recuperación sólo podría lograrse con un crecimiento rápido del sector privado
Una de las prácticas más importantes para la recuperación de empleos, dicen los representantes empresariales, es mediante el trabajo temporal o eventual. Según las cifras que ofrecen, provenientes de la WEC, ha dado alrededor de 4.6 millones de empleos en México. Además, aseguran, si la contratación se hace correctamente, las prestaciones que obtienen los trabajadores pueden estar por encima de las contenidas en la ley, además de incrementar la producción de las empresas.
En el marco del foro virtual realizado para la presentación del documento “Prioridades de política para el camino hacia una recuperación laboral sostenible”, Schaller dijo que era necesario que el gobierno se ayude, eliminando cargas administrativas.
“Para hacer esto, los procesos gubernamentales deben ser eficientes. La eliminación de las cargas administrativas y la burocracia es clave para la creación de nuevos puestos de trabajo”, dijo.
Por su parte, Roberto Suárez fue más lejos, al asegurar que era necesario quitar regulaciones fiscales, mercantiles y laborales.
“El gobierno tendrá que eliminar regulaciones fiscales, mercantiles, laborales, trámites administrativos innecesarios y excesivos, los cuales están trabando la formalización. No creemos en la precarización, no creemos en un mercado laboral abaratado, pero necesitamos que la parte de gobierno y sindical integren a sus valores que la creación de empresas es esencial”.
Cabe mencionar que actualmente la iniciativa privada está a la expectativa de la presentación de la reforma que regularía o, dicen algunos, eliminaría el outsourcing en México. Originalmente se había planteado que la iniciativa de reforma sería discutida y votada el año pasado. Posteriormente se anunció que sería votada hasta febrero de este año, pero hasta la fecha no ha sido presentada.
Según el senador Rogelio Israel Zamora, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), lo más probable es que el tema se discuta hasta después de las elecciones federales que se llevarán a cabo el 6 de junio de 2021. Sin embargo, también hay voces al interior del gobierno federal que aseguran que la iniciativa será presentada antes de que acabe el actual periodo de sesiones legislativo, el 30 de abril.
El gobierno federal ha argumentado que los esquemas de subcontratación laboral, mejor conocidos como outsourcing, han sido utilizados por muchas compañías para evadir impuestos y cuotas patronales, por lo que es necesario limitar su uso pero no prohibirlo completamente.
Según el senador morenista Napoleón Gómez Urrutia, quien ha sido uno de las más severos críticos del outsourcing, estas empresas causan un daño al fisco del orden de los 500 mil millones de pesos, y al IMSS, por las cuotas patronales, de cerca de 50 mil millones de pesos.
“Las formas de subcontratación existen y seguirán existiendo prácticamente en todas las economías, en las cuales también hay de alguna manera un sistema de restricción para evitar abusos, esta responsabilidad viene vinculada a las obligaciones salariales, protección social y derechos laborales. La prohibición tajante puede ser contraproducente, es decir una de las fuentes de creación de empleo, precisamente deriva de las mejoras de productividad que se logran a través de la contratación y subcontratación”, concluyó Roberto Suárez.